Más, mejor y en menos tiempo

El otro día, en el descanso de cinco minutos, pregunté a dos alumnas cómo estaba el horario en los despachos de fiscalistas y de economistas, en la Costa del Sol. Me llevé una agradable sorpresa, ya que ellas terminaban a las 18:00 horas y los viernes tarde no trabajaban. Cuando se incorporó el resto del alumnado, volví a plantear la cuestión y me encontré con una realidad distinta, jornadas de trabajo más españolas que europeas o americanas. En una línea similar, leo titulares en los periódicos en el sentido de que trabajamos más y libramos menos. Sí, nuestra lacónica productividad.

Cierto que es imposible competir con países como los de la Europa del Este, ya que cobran menos y, además, trabajan diez días más al año. Pero si cambiamos de mentalidad, reorientamos nuestras actividades productivas aplicando, por ejemplo, reingeniería de procesos y mejoras continuas, y, en síntesis, caminamos hacia el concepto de producir más, mejor y en menos tiempo, a la par que nos vamos especializando en determinados sectores que incorporan un brutal valor a la economía y aperturamos nuestra cabezas pensantes hacia otras formas organizativas que dejan obsoletas a algunas soluciones administrativas tradicionales, nuestro estadio laboral y empresarial será distinto, no de pasado o presente, sino de futuro y, en todo caso, mejor. Ánimo.